(Buenos Aires, 18 de diciembre) En Argentina, más del 40% de la población adulta tiene hipertensión1, la ingesta diaria de sal es casi un 60% mayor al máximo recomendado por la OMS2 y entre el 50 al 70% del sodio consumido es aportado por productos procesados3. En este escenario, FIC Argentina realizó un nuevo relevamiento sobre el cumplimiento de la Ley Nacional de Reducción de Consumo de Sodio (nro 26.905), la cual establece niveles máximos de sodio para productos cárnicos y derivados; farináceos; y sopas, aderezos y conservas. Este estudio le da continuidad a relevamientos realizados en años anteriores (2014, 2017-2018 y 2022).
Entre los resultados principales se destaca que:
- El 5,8% de los productos relevados excede los valores máximos permitidos por la Ley 26.905.
- Las 4 categorías de productos con mayor cantidad de sodio son:
- Condimentos de carne y pescado,
- Aperitivos,
- Chacinados,
- Quesos duros
- Aderezos.
- Con respecto a las metas regionales para la reducción del consumo de sodio establecidas por la OPS, se observó que un 44,3% de los productos excede los índices establecidos para el 2022 y un 52,2% supera las metas para el 2025.
- Entre 2022 y 2024 disminuyó significativamente el contenido de sodio en algunas categorías de productos. Durante este período la ley Nacional de Reducción de Sodio fue modificada parcialmente sin afectar estas categorías, por lo que podría interpretarse que la reducción en el contenido de sodio de estos productos podría estar vinculada a la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable, cuya implementación coincidió con el período analizado.
La investigación refleja los próximos pasos necesarios para reducir el consumo de sodio en la población:
- Dictar un reglamento para el funcionamiento de la Comisión Nacional Asesora para la Promoción de la Reducción del Consumo de Sodio.
- Ampliar las categorías de alimentos incluidas en la Ley, especialmente a los productos con mayor contenido de sodio y a las principales fuentes de sodio de la dieta actual como son los quesos.
- Establecer límites máximos más exigentes para las categorías que se encuentran incluidas en dicha ley, en base a las metas regionales de OPS.
- Crear mecanismos efectivos y capacidad técnica para la fiscalización y la imposición de sanciones.
- Asegurar el cumplimiento de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable en sus diferentes componentes.
- Generar datos actualizados desde el Estado que permitan monitorear la evolución tanto de la ingesta de sodio y sus principales fuentes alimentarias como de las patologías prevalentes. Resulta imprescindible llevar a cabo nuevas rondas tanto de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo como de la Encuesta Nacional de Nutrición y Salud.
Reducir el consumo de sodio es la medida más costo-efectiva para disminuir la hipertensión arterial, una de las principales causas de muerte cardiovascular. ¡Sigamos defendiendo los avances que logramos y produciendo evidencia para una alimentación más nutritiva!
Conocé más sobre nuestro trabajo:
- Organización Panamericana de la Salud. Metas regionales actualizadas de la OPS para la reducción del sodio [Internet]. 2021. Disponible en: https://www.paho.org/es/documentos/metas-regionales-actualizadas-ops-para-reduccion-sodio ↩︎
- Ministerio de Salud. 2° Encuesta Nacional de Nutrición y Salud. ENNyS 2. Segundo Informe de Indicadores Priorizados [Internet]. 2022. Disponible en: https://iah.msal.gov.ar/doc/902.pdf ↩︎
- Zapata E, Rovirosa A. La alimentación en la argentina. Una mirada desde distintas aproximaciones. CAPA I. Disponibilidad de alimentos y nutrientes a nivel país. [Internet]. CESNI; 2021. Disponible en: https://cesni-biblioteca.org/archivos/La-alimentacion-en-la-Argentina.pdf ↩︎
