El martes 7 de noviembre, en la Ciudad de Buenos Aires, se llevó a cabo el encuentro “Tabaquismo en Argentina: efectos en la salud y en la economía por nivel socio económico” organizado por FIC Argentina en conjunto con Tabaconomia, Hub de evidencia regional a nivel Latinoamérica sobre impuestos al tabaco creado por la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) de Chile y que forma parte de la Iniciativa Bloomberg para reducir el Consumo del Tabaco de Bloomberg Philanthropies. El objetivo del encuentro fue presentar los resultados de una investigación realizada por las organizaciones sobre el impacto esperado del aumento de impuestos en la carga de enfermedad y económica del consumo de tabaco en Argentina, tomando como referencia al año 2022.
Florencia Cámara de FIC Argentina, junto a Natalia Espindola y Ariel Bardach del IECS, estuvieron a cargo de la presentación del estudio de carga de enfermedad y económica que aporta nueva evidencia para la promoción de impuestos al tabaco y reflejan que esta medida tiene un efecto redistributivo, dado que el impacto económico y sanitario es mayor en los hogares con menos recursos.
Resultados principales:
En Argentina mueren más de 46 mil personas al año por causa del tabaquismo, lo que representa el 10,9% de las muertes totales, y además, existen más de 300 mil casos al año de enfermedades asociadas al consumo de tabaco (EPOC, cáncer, entre otras). Se advierte que lo que se recaudó en 2022 por impuestos al tabaco apenas cubre el 16% de todo lo que el país pierde debido al tabaquismo y el 31% del costo médico directo.
La carga sanitaria y económica generada por el consumo de tabaco se distribuye de manera desigual entre la población, afectando en mayor medida a los grupos de menor nivel socioeconómico.
Un aumento de impuestos que incremente el precio en un 50% podría evitar, al cabo de 10 años, más de 49 mil muertes y 190 mil casos de enfermedades o eventos de salud.
El incremento de impuestos generaria un ahorro de costos tanto para el Estado como para la sociedad en su conjunto, a la vez que incrementaria la recaudacion impositiva. En su conjunto, el beneficio economico representaria el 2,3% del gasto total en salud.
El incremento de impuestos tendria, a su vez, un efecto redistributivo en tanto se estima que el ahorro de costos seria mayor en los quintiles de menores niveles de ingreso.
Posteriormente a la presentación de resultados, un panel de expertos realizó algunos comentarios y aportes en base a los resultados. Participaron de este espacio Sebastián Laspiur, Oficial técnico para la prevención y control de las ENT de OPS/OMS en Argentina; Mario Virgolini, Coordinador del Programa Nacional de Control del Tabaco del Ministerio de Salud; Alfredo Morán, Presidente de la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria; y Guillermo Paraje, Profesor titular de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez (Chile) y Director de Tabaconomía.
Al cierre del panel, Mario Bedosti, Coordinador de Incidencia de FIC Argentina, destacó, recogiendo los comentarios de los expertos: “Los resultados de este estudio son fundamentales para la tarea de promoción de políticas para el control del tabaco. Contar con nueva evidencia, que incorpore la cuestión de la redistribución, nos ayudará al momento de proponer las políticas correctas para la protección de la salud de la población, incluyendo la perspectiva de la equidad. Además, espacios como el de hoy resaltan la importancia del trabajo en red y multisectorial, incluyendo voces de todas las áreas y distintas experiencias a nivel nacional y regional, con el fin de lograr políticas que cumplan con los mejores estándares de protección”.
Participaron también del encuentro referentes de la Subsecretaría de Estrategias Sanitarias y de la Dirección de Economía de la Salud del Ministerio de Salud de la Nación; integrantes de organizaciones de la sociedad civil y de la academia (AAMR, UATA, Consciente Colectivo, ASAT, Sociedad Argentina de Cardiología, CEDLAS, CEDES, GRANTAHI, Mejor Aire- Programa UNLP, AASAP, UBA); representantes de la Defensoría del Pueblo de La Matanza; y referentes del Banco Mundial.
Sobre los impuestos al tabaco:
Las políticas fiscales que aumentan los impuestos y precios del tabaco han sido reconocidas como la medida individual más costo-efectiva para reducir el consumo de tabaco y proteger la salud de la población. El principal impacto de esta política se observa en la prevención del tabaquismo en las infancias, especialmente en los hogares más vulnerables.
A pesar de que en los últimos años se dieron reformas sobre el principal componente de los impuestos al tabaco y de que el porcentaje que representan los impuestos respecto del precio de venta supera el mínimo del 75% recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), los cigarrillos en Argentina son muy asequibles y continúan entre los más baratos de la región.
Diversos estudios en la Región, y en Argentina en particular, han aportado evidencia que permite sostener que el aumento de impuestos, además de ser la medida de control del tabaco más costo-efectiva, tiene efectos redistributivos, dado que beneficia relativamente en mayor medida a la población de menores ingresos, quienes además son los más afectados.